En Sigma V Soul, cada modelo empieza con una chispa. Una idea que pide salir, tomar forma y mancharse de realidad. Esa chispa se transforma en algo físico a través de El Origen, la maqueta inicial del diseño. No es un prototipo frío ni una versión de prueba: es la primera obra real, el par fundacional. El punto cero de toda la serie. Y aunque no siempre lo veas, está ahí, sosteniéndolo todo.
Pero… ¿por qué podría valer más que cualquier otro par, incluso más que el Leyenda?
Porque es irrepetible entre lo irrepetible. Y porque no es solo una zapatilla: es una reliquia del proceso creativo.
El alma del modelo, sin filtros
El Origen no está pensado para ser vendido. Es el par que nace antes de que comience el Ritual del Último Par, donde pruebo materiales, combino colores, me contradigo, me sorprendo. Muchas veces lleva trazos espontáneos que no se repiten. A veces, errores que luego se convierten en aciertos. Y otras veces, detalles que solo existen en esa pieza porque ya no volverán a surgir igual.
Es el diseño en estado bruto y, a la vez, su versión más pura.
El germen. El impulso inicial.
La verdad sin corregir.
Valor simbólico, no solo estético
Lo que hace a El Origen tan valioso no es solo lo visual, sino lo que representa:
- Es el primer par que toqué con mis manos cuando ese modelo aún no existía.
- Es donde volqué la emoción más cruda del momento.
- Es el único que no tiene que convencer a nadie, porque está hecho únicamente por necesidad creativa.
Es arte en su forma más íntima, antes del mercado, antes del storytelling. Es el gesto de arranque.
¿Entonces por qué podría valer más que todos?
Porque su valor no se basa en el número limitado de pares, sino en su carga simbólica total.
Si cada modelo de Sigma V Soul solo vive cinco veces (Encuentro, Revelación, Confirmación, Consagración y Leyenda), El Origen no vive cinco veces. Vive solo una.
No está numerado, no entra en la serie. Está fuera del sistema. Y por eso, está por encima del sistema.
Imagínalo como el cuadro inédito del artista. Como el cuaderno de bocetos original. Como la demo grabada en casa antes del disco. Algo que nunca fue hecho para exponerse, pero que encierra el alma del proyecto entero.
¿Se vende?
Normalmente, no. El Origen se queda en el estudio, como archivo vivo.
Pero en ocasiones especiales, podría ponerse a disposición como pieza única:
- Con caja expositiva,
- certificado de origen,
- y un precio acorde a su condición: pieza de museo.
Un objeto para quien no busca solo zapatillas, sino historia.
Para quien quiere tener el corazón de la obra, no solo su eco.
Conclusión: lo que no se repite, se consagra
En Sigma V Soul, todo gira en torno a lo irrepetible. Pero dentro de lo irrepetible, El Origen es el único que no se repite ni cinco veces. Solo existe una vez, en un lugar, en un instante. Por eso, su valor va más allá de lo material: es emocional, artístico y existencial.
Si algún día ves El Origen en exposición, sabrás que estás frente a algo más que una zapatilla.
Estás frente a la primera respiración de una idea.
Y eso, a veces, vale más que cualquier leyenda.